jueves, 13 de octubre de 2011

El humo sale pero nunca regresa.


Atardece una mañana en un torso fuerte,
pero jamás oscurece,
y la luna sigue perdida,
se disolvió en una taza de té de manzanilla.
La luna está al fondo de una copa sangre
el cielo sangra
todo sangra, me rodea
una cubierta de bufandas de lana.
Una telaraña de semen sobre la arena,
trago puños de sal amarga
el mar cae sobre mi y me tapa la boca
y se rompen mis senos como huesos.
La carne del rostro se le ha secado
a la momia del desierto.

2 comentarios:

  1. Woooooow jajaja n.n like x 209435024 es una exquisita mezcla de virilidad, feminidad, virginidad, belleza y vejez que oh por Dios D: me gusta demaciado

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