Uno siempre siente cuando las cosas se van agotando, son como un reloj de arena pegado a la mesa de noche, imparable, se crean caminos invisibles separados, y no hay mas opción que partir, por que esta vida no da chance de detenerse incluso cuando creemos hacerlo, los alrededores lo mueven a uno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario